miércoles, 14 de noviembre de 2012

Carne cruda

Siento cruda la carne en mi boca
y la sangre por mis comisuras corre.
Al llegar a la barbilla gotea
y la lamo de un lametazo grande.
Siento sabor metálico y pesado,
tengo restos rojos en mis manos.
Corto otro pedazo de carne cruda,
y la mastico en una y mil ocasiones.
Me indigesta pero sigo comiendo,
necesito sentir el sabor de la sangre,
y ver de vida ajena manchadas mis manos.
Siento que el fresco cadaver mis ojos mira
y obligo a virar la cabeza y seguir comiendo,
pues es mi labor y es lo que debo,
no puedo escuchar sus lamentos.
Y otro pedazo de su antigua vida corto
para llevarla a mis labios y empezar de nuevo.